El prestigioso filósofo y crítico del arte norteamericano
Arthur C. Danto se interroga acerca de una pregunta compleja que no admite
concepciones unívocas en su flamante libro ¿Qué es el arte? en el que intenta
aproximarse a una definición hilvanada a través de la filosofía y algunos
nombres fundamentales de la historia del arte.
"Platón definió el arte como imitación, aunque resulta
difícil decir si se trata de una teoría o de una mera observación, ya que en la
Atenas de aquel tiempo no había nada más que fuera denominado arte”, arranca el
autor en las primeras hojas del libro editado por Paidós.
En un texto que navega entre el ensayo, la reflexión y la
historia del arte de a destellos puntuales, Danto cuestiona la popular creencia
según la cual el arte es un concepto indefinible, e intenta explicar las
propiedades que constituyen su sentido universal.
Las pinturas de Giotto, Las señoritas de Aviñón de Pablo
Picasso (“un paradigma de pintura revolucionaria”), el espíritu del fauvismo de
Henri Matisse (Mujer con sombrero), el Cuadrado negro del artista abstracto
Malevich en 1915, Jackson Pollock y hasta el compositor John Cage se suceden a
través del relato para dar forma a una explicación que atraviese todos los
períodos.
El contexto de cada producción es fundamental a la hora de
intentar una aproximación a la pregunta que dispara el libro, según explica el
propio autor nacido en Michigan en 1924, considerado uno de los críticos de
arte más reputados en Estados Unidos.
"En mi opinión, para alcanza una definición mejor que
la de Platón, hay que mirar a los artistas más recientes, ya que son más
propensos a restar de sus teorías propiedades anteriormente consideradas
esenciales para el arte, como la belleza”, se despacha el autor conocido por
sus audaces teorías sobre el arte.
Danto hace especial hincapié en dos grandes artistas: Marcel
Duchamp, relacionado al dadaísmo, y Andy Warhol, referente del pop art, ambos
vinculados a movimientos “hasta cierto punto filosóficos, “pues eliminaban
características que se habían considerado hasta ese momento intrínsecas al
concepto del arte”.
"Sirviéndome de Duchamp y Warhol para brindar mi propia
definición de arte, he intentado entresacar ejemplos de la historia del arte
para mostrar que la definición siempre ha sido la misma. Así, me ayudo de
Jacques-Louis David, Piero Della Francesca, y de la Capilla Sixtina de Miguel
Angel”, destaca Danto para agregar que “lo que lo hace arte se encuentra una y
otra vez a lo largo de la historia”.
A grandes rasgos y con tono filosófico -por donde se mechan
los conceptos de Descartes, Kant y Hegel-, Danto arguye que una obra de arte se
define siempre por dos criterios esenciales: el significado y la
materialización. A eso, añade un tercer criterio, el de la interpretación que
cada espectador aporta a esa obra.
El arte es ante todo un “significado encarnado” y son sus
propiedades invisibles las que convierten a algo en arte: aquello que lo hace
arte es una propiedad esencial sin la cual un objeto no puede entenderse o
interpretarse como tal.
Para el autor, "un artista encarna significados" y
eso es precisamente lo que vincula a los grandes maestros mencionados a lo
largo del volumen.
Profesor emérito de la Universidad de Columbia y crítico de
arte del semanario The Nation, Danto está acostumbrado a remover los cimientos
de las artes plásticas con sus artículos y ensayos, desde que en los años 80
anunció el fin del arte y una época basada en la incertidumbre y la ausencia de
referencias.
Sus libros El abuso de la belleza, La transfiguración del
lugar comúm y Después del fin del arte conforman una trilogía que intenta
llegar a comprender los cambios radicales en el arte desde los años 60.
(APT)