En el concepto de “esclavitud moderna” se integran, entre
otros, la trata de personas, los matrimonios forzados, la venta y explotación
de niños y la servidumbre sexual o doméstica como pago por deudas. Las víctimas
tienen su libertad negada y son usadas, controladas y explotadas por otra
persona con fines de lucro, sexo o, simplemente, por la emoción de la
dominación.
ONG/ Walk Free Foundation
¿Cuántos esclavos hay? Según el Índice Mundial de Esclavitud
de la ONG australiana Walk Free Foundation,
en el mundo hay 29,8 millones de nuevos esclavos. Esta realidad es, sin
embargo, poco conocida y permanece oculta en casas de zonas residenciales y
también en lugares de trabajo.
¿Cómo llegan a esta situación? En el oeste africano y el
sudeste asiático se perpetúan sistemas de “esclavitud hereditaria”. En otras
zonas, las víctimas son secuestradas y vendidas para trabajos o matrimonios
forzosos. Un tercer grupo ha sido engañado con promesas de una educación o un
trabajo mejor. China, Pakistán Nigeria, Etiopía y Rusia registran los mayores
niveles.
Europa. Los países de Europa Occidental tienen el menor
riesgo general de esclavitud. Sin embargo, la dificultad actual para aportar
recursos suficientes impide que sea completamente erradicada. En Reino Unido,
con una de las cifras más bajas, distintas estimaciones aseguran que hay más de
4.000 personas en esta situación. En Bulgaria y Rumanía, por el contrario, se
detectan “decenas de miles de casos”.
América. Canadá y Estados Unidos, con una fuerte demanda de
mano de obra barata, son dos principales destinos para la trata de personas.
México es un país de tránsito importante para los sudamericanos y
centroamericanos que intentan entrar a Estados Unidos. Los países de la cuenca
del Caribe muestran, con la excepción de Haití, un menor nivel de riesgo de
violaciones de derechos que la mayoría de los países latinoamericanos.
Asia. India es el lugar con mayor índice de esclavitud
moderna. Y, mientras que en Australia y Nueva Zelanda apenas hay riesgo, en
Pakistán y Tailandia es muy alto.
Los nuevos grilletes. Las “cadenas” de la nueva esclavitud
no siempre son físicas. El miedo, el aislamiento y las deudas se usan para
retener a una persona contra su voluntad.