Ayer, en el 20 aniversario del atentado a la Mutual Israelita
quedaron expresadas cuatro miradas diferentes con respecto a la marcha de las
investigaciones, sin embargo en los cuatro actos realizados en Buenos Aires
todos coincidieron en la consigna de poner fin a la impunidad de los autores
del atentado y a la de sus encubridores.
Los actos tuvieron como escenarios la propia sede de la
Mutual Israelita Argentina en el barrio de Once, el Congreso de la Nación, el
Palacio de Tribunales y la Plaza de Mayo.
Desde un escenario sobre la calle Pasteur al 600, en el
mismo lugar de la explosión el 18 de julio de 1994, dirigentes de la AMIA y la
DAIA y familiares de las víctimas del atentado reiteraron pedido de Justicia en
memoria de los 85 muertos y de una nueva investigación que permita establecer
la conexión local que permitió la concreción de ataque terrorista en la
Argentina.
Este acto representa la voz oficial de las dos
instituciones, dirigencia que fue cuestionada en su momento por la connivencia de uno
de sus presidentes, Rubén Beraja, con el gobierno de Menem, pero también por
el apoyo a la investigación del juez Galeano que enturbió todo el proceso
judicial. En este acto participó el periodista opositor Alfredo
Leucovich (Leuco) que aprovechó el acto para realizar una diatriba contra el
canciller Héctor Timerman y el gobierno nacional.
A pocas cuadras de allí, en la Plaza Lavalle ubicada frente
al Palacio de Tribunales, a partir de las 9.30 se realizó el acto de Memoria
Activa en el que los miembros de esa organización reclamaron la remoción del
fiscal especial que investiga el atentado a la AMIA, Alberto Nisman.
El fiscal fue objeto de las críticas de Memoria Activa, que
a través de Diana Malamud, consideró "que ha demostrado su total
incapacidad para investigar en esta causa".
Malamud, la principal oradora del acto, también le dedicó
unos párrafos de su discurso a la dirigencia de la comunidad judía.
Recordó que "trabajaron junto al ex juez (Juan José)
Galeano en el armado de las pistas falsas para desviar la investigación por lo
que luego el ex presidente de la DAIA, Rubén Beraja, fue acusado por
encubrimiento. Para protegerlo se han dedicado a entorpecer y retrasar la
causa, intentando salvar en el camino a Galeano, Palacios, Castañeda, Corach,
Anzorreguy y Menem".
A las 13 se realizó el acto de la Asociación 18J
Sobrevivientes, Familiares y Amigos de las Víctimas del Atentado a la AMIA, en
Plaza de Mayo, en el que las víctimas fueron homenajeadas con una suelta de
globos negros.
Allí, Hugo Fryszberg, uno de los sobrevivientes del atentado
en el que 85 personas perdieron la vida y hubo más de 300 heridos, destacó:
"Estos 20 años me han acompañado con la certeza de que lo que pasó no lo
debemos olvidar. Ser sobreviviente de ese hecho significa padecer de por vida
cicatrices invisibles".
Tras las distintas exposiciones de los oradores de ese acto,
el titular de esa asociación, Sergio Burstein, remarcó que “hace 20 años que la
Justicia trabaja para legitimar la impunidad, no sólo con el atentado a la
AMIA, sino también el atentado a la Embajada de Israel".
El último acto del día fue el que organizó la Agrupación por
el Esclarecimiento de la Masacre Impune de la AMIA (APEMIA), frente al Congreso
Nacional, con la presencia de numerosos legisladores de ambas cámaras.
Durante el acto la agrupación reclamó la apertura de los
"archivos secretos" de la causa, la conformación de una
"comisión investigadora de la verdad" y "juicio y castigo a los
culpables".