El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, habló del conflicto que mantiene el
país con los holdouts. En una entrevista concedia al periodista Santiago O´Donnel, advirtió por el peligro de "sentar el precedente
para que empresas estadounidenses puedan embargar activos de gobiernos
extranjeros".
Julian Assange, que sigue recluido en la Embajada de Ecuador
en Londres por la presión judicial a la que lo someten Estados Unidos y Suecia,
realizó declaraciones a la prensa Argentina sobre el conflicto que mantiene
nuestro país con los fondos buitre.
"Es un caso complejo y hay que entender qué hay
detrás", expresó Assange al diario Página 12, en una entrevista exclusiva
que se publicó en la edición de este domingo.
"Me parece interesante preguntarnos por qué el gobierno
estadounidense apoya estas acciones, cuando al comienzo del juicio parecía que
el Departamento de Estado quería relaciones tranquilas con la Argentina y no
apoyaba a los fondos buitre, y ahora sí los apoya aunque claramente está
causando tensiones con la Argentina", dijo el fundador de WikiLeaks sobre
la disputa con los holdouts.
Desde hace dos años, Assange esta encerrado en el pequeño
departamento del barrio Knightsbridge que ALBERGA a la Embajada de Ecuador en
Londres, donde se encuentra asilado, el director del sitio de publicaciones
filtradas WikiLeaks
Este es un fragmento de la entrevista realizada por el
periodista Santiago O' Donell:
- Parece responder al deseo de Estados Unidos de sentar un
precedente para que empresas estadounidenses puedan embargar activos de
gobiernos extranjeros, lo cual genera un incentivo genuino en favor de las
empresas estadounidenses a la hora negociar con gobiernos extranjeros. Esto en
general. En el caso argentino en particular, parece que además la están
penalizando por una decisión geopolítica que no le gustó.
¿Quiere decir la negociación con Irán?
–Sí.
El gobierno estadounidense dice que su sistema judicial es
independiente y que no tiene nada que ver con la decisión, pero usted dice que
el Departamento de Estado apoya los fallos.
–Las acciones adoptadas para hacer cumplir el fallo valen
más que las declaraciones diplomáticas. A nivel social, los jueces son personas
y las personas tienen amigos. Se mueven en circuitos sociales y profesionales;
si esos circuitos estan en contra de una determinada decisión, el juez que tomó
esa decisión debe pagar un costo, mientras que si la decisión recibe apoyo en
esos circuitos, el juez obtiene un beneficio. No conozco a este juez (Thomas
Griesa)...
No es sólo un juez, el fallo fue confirmado en la cámara y la Corte
Suprema lo ratificó al negarse a escuchar la apelación de la Argentina.
–Por eso, es más que un juez en particular. Si lo miras
desde una perspectiva más amplia, en los últimos diez años Estados Unidos se ha
embarcado en un programa de extraterritorialidad. En vez de invadir países a la
fuerza, ha ido introduciendo la capacidad de cumplir funciones típicamente de
Estado en otros territorios, combatiendo la inmunidad soberana, forzando
tratados de policía corporativa, estableciendo que los otros países se vean
obligados a extraditar ciudadanos a Estados Unidos cuando Estados Unidos
quiera, y obliga a esos países a desplegar a sus policías para confiscar
pruebas o clausurar servicios de Internet a pedido de Estados Unidos. La mitad
de esas medidas se refieren a leyes criminales y la otra mitad a reclamos
comerciales.
Así que esta decisión en favor de los fondos buitre encaja
perfectamente en la estrategia.
–Sí. Me tocó vivirlo en carne propia. Mi fiscal, el fiscal
federal que lleva la causa contra WikiLeaks, está basado en Alexandria,
Virginia, que es una extensión del centro de poder que es Washington DC. Se
trata del mismo fiscal que lleva la causa contra el neozelandés de Kim Dotcom y
que imputó a personas de 69 países. O sea, su fiscalía es un centro de
extraterritorialidad. Nadie me acusa de haber hecho algo dentro de Estados
Unidos. La única acusación es que publicamos documentos estadounidenses. A Kim Dotcom
tampoco lo acusan de hacer algo en Estados Unidos, sino que los productos de
Fox y EMI y de otros gigantes de marcas registradas estadounidenses terminaron
en el sistema de compartir archivos MegaUpload (que maneja Kim Dotcom) y por
eso tratan de extraditarlo desde Nueva Zelanda a Estados Unidos. No lo acusan
de tener una empresa en Estados Unidos o de que haya violado alguna ley
estadounidense directamente, sino indirectamente. Esto significa que una
empresa estadounidense o sus accionistas pueden llegar a Nueva Zelanda desde el
otro extremo del mundo y ejercer un poder coercitivo para llevar a alguien a
ser juzgado en Estados Unidos. Si alguien controla las leyes y a la policía de
un determinado país, entonces controla a ese país. Por la manera en que los
datos fluyen a través de Internet, todos estamos conectados jurisdiccionalmente
a Estados Unidos porque usamos Google, que es una empresa estadounidense. Y en
América latina más, ya que el 98 por ciento de las telecomunicaciones de la
región pasan por Estados Unidos. Acá en Gran Bretaña han extraditado a varias
personas. A Baba Ahmed lo extraditaron por escribir artículos sobre el
yihadismo. Hablando de libertad de expresión, escribes un artículo sobre los
jihadistas y te extraditan y te procesan por terrorismo.