El presidente del Banco Central (BCRA), Alejandro Vanoli,
aseguró ayer que el próximo año “no habrá una devaluación” del peso frente al
dólar estadounidense y descartó así que el gobierno vaya a ceder ante las
“presiones” de los mercados financiero y exportador.
No obstante, el funcionario anticipó que el objetivo oficial
de “dar certidumbre y confianza de que no va a haber una devaluación (de la
moneda nacional) no quiere decir que el tipo de cambio se va a mantener fijo”.
Así, Vanoli aclaró que el objetivo del Banco Central es
mantener lo que se denomina la flotación administrada, porque “la Argentina no
tiene un tipo de cambio fijo, en estos últimos años ha mantenido esta
política”.
Vanoli consideró que el precio del dólar debería estar en
2015 en un nivel que de alguna manera pueda conciliar mantener la
competitividad de los productos argentinos que se exportan y garantizar que “no
haya una inestabilidad financiera y una excesiva volatilidad”.
El titular de la autoridad monetaria indicó que ante la arremetida
de los fondos buitres en los juzgados de Estados Unidos “fue necesario anclar
las expectativas, dar certidumbre de que
no iba a haber una devaluación a la cual
fuera llevado el país y el Banco Central”.De ese modo, apuntó que “dar
certidumbres y confianza de que no va a haber una devaluación no quiere decir que el tipo de cambio se va a
mantener fijo sino que se va a administrar en función de distintas variables
para mantener competitividad en la
economía”.
Eso, dijo, supone “ver un conjunto de variables globales”.
En ese sentido, señaló que habrá que “ver qué pasa con las monedas de los
distintos socios comerciales” del país.
El jefe del Central estimó que el freno a una nueva corrida
cambiaria —la novena en los gobiernos de Cristina Kirchner— y la baja del
precio del dólar en el mercado negro se logró debido al conjunto de medidas
tomadas por la autoridad monetaria. “Todo esto pasó por un conjunto de medidas,
fundamentalmente la decisión política de no ceder a estas presiones. Señales muy
claras de que la devaluación no era una opción y que se iban a tomar todas las
medidas para que esa decisión se pudiera cristalizar”, dijo.
Entre las decisiones oficiales, destacó la acción del Estado
nacional para buscar ingresos a través de un acuerdo con los exportadores de
granos para que liquiden la cosecha y el intercambio de monedas (swap) con
China.
Asimismo, resaltó que se haya decidido tratar y controlar
las expectativas alimentadas por “el mal uso” del contado con liquidación, que
es la metodología utilizada por grandes inversores para fugar divisas a través
de la compra de bonos en pesos aquí y su posterior venta en dólares en el
exterior.
“Los resultados están
a la vista, lo cierto es que esta operatoria se desarmó y las expectativas de devaluación
se derrumbaron por sí mismas”, sostuvo el titular del BCRA.
“Hubo una campaña por
la que se inducía a dolarizar creando miedo en un contexto donde no solamente
está el fallo del juez (Thomas) Griesa sino que también se dan un conjunto de
factores de la economía mundial como recesión de los países vecinos, caída de
los commodities”, apuntó.
(La Capital)