Se está por lanzar el proyecto que digitalizará la obra del escritor Gabriel García Márquez. Cuál es el detrás de escena de este proyecto mundial.
A días de anunciarse el comienzo
de la digitalización del archivo personal -entre 24.000 y 25.000 textos e
imágenes- del Premio Nobel de Literatura, las especialistas Jen Tisdale y Liz
Gushee, integrantes del Centro Harry Ransom en Austin que posee el archivo,
están a cargo de la titánica tarea que se completará en noviembre de 2017 para
lanzarlo en la red, en un proyecto que definieron como muy "abarcativo, poco
habitual, sin precedentes".
Más de 75 cajas con documentos,
manuscritos de trabajos publicados e inéditos, cartas, 43 álbumes de fotos, 22
cuadernos de recortes, material de investigación, notas y guiones, entre
cientos de perlas de una de las figuras clave en la cultura de América Latina
arribaron en noviembre de 2014 al prestigioso Centro Harry Ransom, de la
Universidad de Texas.
Este tesoro único y universal, en
manos estadounidenses por decisión familiar, y por el que, según trascendió, ni
el gobierno colombiano ni el mexicano insistieron conservar, es la morada final
del legado privado de García Márquez, quien durante décadas tuvo prohibida la
entrada a ese país por “actividad subversiva”, una situación que concluyó en
1995 cuando Bill Clinton le concedió el visado.
Los especialistas de Austin no
tardaron en cumplir su palabra, la de que “cualquiera podrá consultar el
archivo”, como pregonaron apenas adquirieron este acervo, y hace poco
anunciaron el inicio de su digitalización. A su cargo están Liz Gushee,
directora del Servicio de Colecciones Digitales, y Jen Tisdale, de Asuntos
Públicos, las dos bajo la órbita de su director, Stephen Enniss.
Ambas
detallaron el proceso que concluirá con un lanzamiento mundial online. Para los
más ansiosos ya subieron (hrc.contentdm.oclc.org/c) el audio y el texto del
discurso cuando recibió el Premio Nobel, los primeros manuscritos con
correcciones de novelas como “Crónica de una muerte anunciada” y “El amor en
los tiempos del cólera”, una carta a Jimmy Carter pidiendo por la vida del
boricua Andrés Figueroa-Cordero y otra a Salman Rushdie.
“Estos documentos de referencia
han sido sumamente populares. También atrajo muchos visitantes una muestra
online de los materiales de la colección”, dijo Tisdale, en tanto su colega
agregó: “esta selección da una buena idea del caudal y espectro del archivo,
además de un panorama de lo que García Márquez fue como novelista, periodista y
activista social”.
Desde que abrió el archivo, el 21
de octubre pasado, hubo más de “23.000 visitas de los materiales en la página
del Ransom Center; cuatro mil reproducciones de un video sobre el archivo en
YouTube; las guías de referencia en español e inglés figuran como la segunda y
tercera con más accesos entre el 21 de octubre y el 6 de enero y el Congreso
del 28 y 30 de octubre, “La vida y el legado de Gabriel García Márquez”, cubrió
el cupo y más de 2.400 personas que siguieron el evento vía streaming”, subrayó
Tisdale.
Para la nueva empresa, sin
embargo, se recogerán “entre 24 y 25 mil textos e imágenes del archivo; no es
el archivo físico completo pero es una buena parte. Cualquiera podrá acceder
desde cualquier lugar del mundo a través de la página web del Ransom Center y
quien visite las instalaciones podrá ingresar a nuestro salón de lectura para
ver e investigar con el archivo”, explicó Gushee.
“El plan -detalló- es digitalizar
por etapas, empezar por los manuscritos de los borradores de sus obras, luego
las notas de un libro sobre Cuba que nunca escribió, después una selección de
más de 100 fotografías tomadas de 43 álbumes que ilustran su vida a lo largo de
casi nueve décadas, después pasaremos a digitalizar los 22 libros con apuntes
que detallan con minuciosidad su obra y su trabajo y, finalmente, sus objetos
de la ceremonia del Premio Nobel y los nueve pasaportes en los que si figuran
sus viajes por el mundo a partir de 1957”.
“Implementaremos un visor de
imágenes que permitirá ver el contenido de varias páginas a la vez para
comparar los manuscritos y borradores. El proyecto se completará a fines de
noviembre de 2017 para lanzarlo online y se irán escribiendo artículos acerca
de los progresos, destacando algunos de los materiales en los que van
trabajando”, contó.
En cuanto a lo técnico, Gushee
sostuvo que “la prioridad es garantizar la seguridad de los materiales,
manejarlos con mucho cuidado y utilizar equipamiento apropiado para la
digitalización. Para algunos casos, usaremos un escáner de superficie plana
(flatbed scanner) y para otros materiales más frágiles uno cenital o elevado
(overhead scanner) con el que cuenta el Centro, además de registros
fotográficos”.
Sobre la importancia de este
archivo, la especialista remarcó que “por cuestiones vinculadas a los derechos
de propiedad intelectual es poco habitual que una parte importante del archivo
de un escritor contemporáneo se digitalice y se suba a Internet para que esté a
disposición de los estudiosos”.
“Existen muy pocos precedentes y
la mayoría no son tan abarcativos como el proyecto García Márquez. Algunos son
el Proyecto de Manuscritos Digitales Samuel Becket (/www.beckettarchive.org) y
los seis borradores de un capítulo de ‘The pale king’, la novela de David
Foster Wallace.