Eliminaron de la web más de diez mil
investigaciones realizadas por la agencia del Ministerio de Justicia.
Por Diego Martínez
El Ministerio de Justicia y
Derechos Humanos que conduce Germán Garavano decidió eliminar de la web a su
cargo más de diez mil investigaciones periodísticas y notas de prensa
publicadas por Infojus Noticias, portal que en los últimos tres años dedicó
amplias coberturas a temas como violencia institucional, violencia de género,
lavado de dinero o civiles imputados en delitos de lesa humanidad. Entre los
contenidos que la gestión Cambiemos decidió invisibilizar a los lectores
aparecen temas sensibles para el presidente Mauricio Macri como su imputación
por espionaje ilegal como jefe de Gobierno porteño, la represión en el Hospital
Borda, el incendio del depósito de documentos de la empresa Iron Mountain en el
que murieron diez personas o la relación de la familia de la primera dama con
talleres de costura clandestinos. Los trabajadores de Infojus expresaron su
“preocupación por la desaparición de miles de notas”, advirtieron que la
decisión se tomó “en un contexto de vaciamiento de la agencia” –que ya despidió
a 12 de sus 44 trabajadores– y que consultaron pero no obtuvieron ninguna
explicación de las actuales autoridades. La nueva directora del portal, Sabrina
Santopinto, se negó anoche a responder preguntas de Página/12 y derivó la
consulta a una empleada que nunca atendió el teléfono.
La noticia sobre las notas
desaparecidas comenzó a circular el miércoles a la noche, a medida que lo
advertían redactores, editores y lectores de Infojus Noticias, portal que en
base a un trabajo riguroso se convirtió en sitio “de consulta permanente en el
ámbito periodístico y judicial”, como recordó ayer el comunicado de la
asamblea. Sobre un total de 15 mil artículos publicados desde 2013 y relevados
en diciembre por los trabajadores, ayer se podía acceder sólo a “un diez por
ciento”, calcularon. “No sólo nos preocupa la pérdida de nuestro trabajo de
tres años sino que muchas de las notas tenían un fuerte valor testimonial,
documental e histórico. Descubrimos que se ‘borraron’ coberturas enteras sobre
temas de violencia institucional, violencia de género, femicidios, lesa
humanidad, talleres textiles clandestinos, delitos económicos y lavado de
dinero, narcotráfico, y muchas otras áreas en las que Infojus Noticias era
referente”, informaron.
El criterio para las
desapariciones, que el Gobierno hasta el momento no explicitó, tampoco es del
todo claro para los trabajadores de prensa. “En temas como lesa humanidad
parecen ser cuidadosos porque saben que es sensible”, sugirieron. En el sitio
sobreviven notas sobre la ESMA o el Plan Cóndor pero llamativamente borraron
algunas con datos sobre la aparición de Ignacio Guido Carlotto, el nieto
recuperado de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, o
sobre los abogados que luchan a favor de la impunidad de represores,
informaron.
Entre las desaparecidas había
notas sobre el despido de delegados de Shell y fallos judiciales que intimaban
al entonces presidente de la empresa Juan José Aranguren, ahora titular del
Ministerio de Energía y Minería. “El presidente de Shell tiene 24 horas para
reincorporar a una delegada despedida”, era uno de los títulos que ya no están.
También fue borrada una serie de artículos (salvo el último) sobre una maniobra
para cobrar ilegalmente bonos de la dictadura y estafar al Estado nacional que
denunció la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos
(Procelac) y en la que está imputado el escribano Nicanor Moreno Crotto, a
quien Macri designó coordinador de Asuntos Legales de la Jefatura de Gabinete,
tal como informó Página/12. Entre los títulos que ayer a la tarde habían sido
bajados figuran “Cómo hacía el HSBC para ocultar la ruta del dinero”, “El HSBC,
un banco en la mira de la Justicia por lavado de dinero”, “A un año de la
represión en el Borda: 10 imágenes para no olvidar”, “Escuchas ilegales:
rechazan el pedido de sobreseimiento de Mauricio Macri”, “Clarín lidera la
lista de empresas argentinas en el HSBC de Suiza” y varias notas sobre los bomberos
muertos en Iron Mountain o las pruebas de que el incendio fue intencional.
El vaciamiento de Infojus y la
reducción del trabajo de los periodistas habían comenzado diciembre con el
pedido de renuncia al periodista Cristian Alarcón, creador y director del
portal. Las caras visibles del gobierno de Macri fueron Santopinto (vocera de
Jorge Rizzo, presidente del Colegio de Abogados de la Capital y ex concejero de
la magistratura), Pablo Altclass (ex asesor del empresario de medios Daniel
Hadad) y Soledad Lladó, quienes prometieron ante los trabajadores que no habría
despidos. El 30 de diciembre, sin embargo, echaron a la subdirectora y al jefe
de redacción, y la semana pasada a otros diez redactores, editores, fotógrafos
y editores de video, a quienes bloquearon los usuarios de sus computadoras a
modo de notificación.
Los despidos fueron justificados
y publicitados ampliamente desde el diario Clarín, que presentó a Infojus
Noticias como “una agencia de difusión K con más de 200 empleados” y planteó
una insólita comparación con los “20 empleados” del Centro de Información
Judicial (CIJ), el portal de propaganda del presidente de la Corte Suprema,
Ricardo Lorenzetti, que se limita a cargar fallos y resoluciones judiciales. La
Comisión Gremial Interna y la asamblea de trabajadores de Clarín tomaron
distancia de la operación al sacarse una foto en la redacción, solidarizándose
con los despedidos de Infojus.
“Lo que persiguen es el
desmantelamiento de un proyecto periodístico, de un medio que no puede hacer periodismo
con las noticias que el Estado produce. No puede informar sobre la ilegalidad
con que el nuevo gobierno procede al tomar grandes decisiones con el
instrumento preferido del presidente”, advirtió entonces Alarcón al
solidarizarse con sus ex compañeros que se declaraban en estado de asamblea y
exigían la reincorporación de los despedidos. El periodista apuntó que desde el
10 de diciembre era evidente el vaciamiento de contenidos y la conversión en un
portal para dar comunicados oficiales de Garavano, agregó que en su gestión
“Infojus Noticias se negó a ser una agencia oficial, un portal K, un órgano de
propaganda”, y destacó con dolor que las visitas de lectores se habían reducido
de 322 mil en noviembre a poco más de 120 mil en enero.
Santopinto se negó a explicar
ayer por qué y con qué criterio decidieron desaparecer notas de prensa. Tampoco
quiso hablar sobre su promesa incumplida de que no habría despidos y ni
siquiera sobre su valoración del portal. Sugirió hablar con Lladó, que nunca
respondió. “Exigimos a las autoridades del Ministerio de Justicia y Derechos
Humanos que investiguen qué pasó y vuelvan a poner online todo ese material”,
plantearon ayer los trabajadores (sobrevivientes) de Infojus Noticias.
Fuente: Página 12