Con la excusa de ser "ñoquis" para enfrentarlos con la gente, ya hay unos 10 mil despedidos por el nuevo gobierno, entre el Senado, el CCK y los municipios.
Entre los más de 2 mil despidos
en el Senado, los del Centro Cultural Kirchner, los de la jefatura de gabinete
y los alrededor de 7 mil de los municipios macristas, ya suman unos 10 mil los
trabajadores estatales echados por el PRO, bajo el argumento de que son
"ñoquis".
Los despidos macristas en el
Estado nacional, bonaerense y los municipales ya son masivos, sin que se haya
hecho una investigación real sobre los roles que cumplían los echados.
El titular del Sistema Federal de
Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, justificó los masivos despidos
en el Centro Cultural Kirchner (CCK) por haber ingresado en 2015, el año de su
inauguración.
El titular del Sistema Federal de
Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, justificó los 600 despidos en el
Centro Cultural Kirchner (CCK) por haber ingresado en 2015, el año de su
inauguración, como si por haber entrado durante el gobierno anterior merecieran
ser expulsados.
La actual vicepresidenta de la Nación y máxima autoridad del
Senado despidió 2.035 trabajadores de esa Casa. Todos serían
"ñoquis", gente que no va a trabajar. ¿Cuál es el criterio para
definir si alguien es ñoqui o no? En su rol como senadora porteña, Gabrieña
Michetti estuvo ausente en 38 de 55 tratamientos legislativos. Su presentismo:
30,9%.
Al respecto, el titular del
gremio del personal legislativo, Norberto Di Próspero, le recordó que primero
despidió y después creo una comisión para investigar los casos.
En la Jefatura de Gabinete, a
cargo del hombre estrella del PRO, Marcos Peña, se dio una situación similar.
El jefe de ministros resolvió dejar sin empleo a 150 trabajadores que se
enteraron de la decisión por una lista en la puerta que les impidió el ingreso.
Los empleados cesanteados, sin
previo aviso ni notificación formal, mayormente son trabajadores contratados en
distintas modalidades a los que no se les renovó el vínculo vencido el 31 de
diciembre pasado.
A nivel municipal, los despidos
también se hicieron masivos. El secretario general de la Federación de
Sindicatos Municipales Bonaerenses (Fesimubo), Rubén “Cholo” García, denunció
el despido de más de 2.600 empleados en ocho municipios de la provincia de
Buenos Aires, por lo que declaró el estado de alerta y movilización del gremio
en defensa de los puestos de trabajo.
“Los telegramas comenzaron a
llegar ayer, en el primer día hábil del año, por eso estamos evaluando con los
sindicatos locales cuál es la situación concreta en cada distrito”, afirmó el
dirigente sindical.
En diálogo con la agencia Télam,
García dijo que se están constituyendo mesas de discusión en algunos municipios
para evaluar las características de las cesantías.
“Hay despedidos con cinco, seis,
y hasta 12 años de antigüedad, otros sólo de algunos meses”, destacó para
agregar que están elaborando un relevamiento “a medida que van llegando los
telegramas”.
Los datos recogidos por la
Fesimubo hasta hoy indican que en los municipios donde se denunciaron más
despidos son Quilmes con unos 1.000 empleados cesanteados y Malvinas Argentinas
con otros 900, seguidos por Coronel Vidal (300), Lanús (290), Coronel Suárez
(60), Adolfo Alsina (60), Chascomús (32) y Esteban Echeverría (30), lo que suma
un total provisorio de 2.672 trabajadores.
En este contexto, García explicó
que la Ley 14.656, que entró en vigencia el 6 de julio de 2015, garantiza la
estabilidad del empleo público y el Salario Mínimo, Vital y Móvil “para los
trabajadores que cumplen los 12 meses de servicio”.
Lo preocupante es que la
tendencia lejos de revertirse parece agravarse. Cuando todavía estaban
resolviendo los pasos a seguir por los 8 municipios en cuestión llegaron
novedades nada alentadoras de La Plata. Allí el intendente, Julio Garro, firmó
4500 despidos, muchos de ellos para empleados de planta permanente.